Una estrategia de proyecto se basará en la estrategia corporativa, que permitirá al negocio implementar su estrategia general. La comunicación es clave, ya que sin ella puede haber problemas y dificultades para entender lo que se está haciendo en el proyecto, creando un fracaso en la gestión.
La gestión de proyectos suele ser un proceso central dentro del modelo empresarial global. Los programas y proyectos permiten a la organización efectuar cambios de una manera gestionada y controlada. Destacando que muchas empresas consideran que la gestión de programas implica la gestión de beneficios empresariales, creando la distinción de la gestión de proyectos.
Los pasos para implementar una estrategia de proyectos
Su implementación requiere del desarrollo de procesos creados con las partes interesadas, además del conocimiento pleno de las compañías que lo realizarán. Para ello, se debe considerar la misión, visión, políticas y factores externos a la organización. Granadino añade, además, que la alta gerencia debe desarrollar la estrategia al mismo tiempo que identifica oportunidades de negocios. Estas, previa evaluación, serán seleccionadas para posteriormente convertirse en casos de negocio u otros documentos.
De ellos pueden resultar uno o más negocios adicionales que proporcionen productos, servicios o resultados que generan beneficios. “Los beneficios los determina la alta gerencia de la empresa, que utilizará los entregables del proyecto para lograr que estén alineados con la estrategia del negocio”. En este sentido, el experto resalta los pasos de implementación de una estrategia de proyectos:
1. Definir la estrategia de negocios.
2. Identificar las oportunidades existentes en ella.
3. Seleccionar la estrategia de proyectos en base a ello.
4. Considerar los beneficios que tendrán cada oportunidad y cada estrategia.
De esta manera, implementar una estrategia de proyectos permitirá a las organizaciones relacionar los resultados del proyecto a los objetivos del negocio. Asimismo, podrán competir de una manera más eficaz en los mercados y generar valor agregado incrementando los beneficios. Todo ello responde en forma sistémica a los cambios en el entorno empresarial sobre los proyectos, mediante una adecuación de los planes para la gestión del mismo.